TEMA 11. ATENCIÓN MEDICA FAMILIAR ANTICIPATORIA ANTE ENFERMEDADES FRECUENTES: Diabetes Mellitus, hipertensión arterial, cáncer, cardiopatías, etc.
La forma óptima de tratar prácticamente
todas las enfermedades, incluido el cáncer, es la prevención.
El medico de primer contacto es el
encargado muchas veces de dar atención a toda la familia o a la mayoría de los
integrantes por lo que tiene un amplio conocimiento sobre determinantes y antecedentes de relevancia sobre enfermedades
por las que pase algún integrante de la familia, pues una historia familiar
positiva es un factor de riesgo para muchas enfermedades crónicas, ya que
refleja las consecuencias de la susceptibilidad genética, el entorno compartido
y los comportamientos comunes.
Un
historial de salud familiar detallado es una herramienta muy útil para la
evaluación del riesgo de enfermedades crónicas comunes. Los riesgos relativos y
los odds ratios para varios tipos de cáncer, accidente cerebrovascular,
diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares se doblan si hay un pariente
afectado de primer grado y se cuadruplican si hay más de un familiar de primer
grado afectado, por lo que este apartado en la historia clínica no puede dejar
de realizarse para que de esta manera se pueda lograr dar una mejor atención
medica anticipatoria y preventiva ante enfermedades frecuentes dentro de la
familia.
La
notable carga humana y social que determina la diabetes de tipo 2 y la
dificultad para tratarla de forma eficaz cuando está desarrollada la convierten
en un objetivo adecuado para la prevención. Además, la existencia de un estado
definido de aumento del riesgo, la prediabetes, permite identificar a los
pacientes con más probabilidad de obtener beneficio. Las intervenciones que se
han estudiado hasta la fecha incluyen cambios en el estilo de vida como pérdida
de peso y ejercicio, así como varios fármacos antidiabéticos.
En
el caso de enfermedades como la hipertensión, donde el tratamiento dura toda la
vida, el control de la hipertensión arterial en personas hipertensas no restablece
el riesgo cardiovascular a la normalidad, y la mayoría de las personas
hipertensas no alcanzan las lecturas de presión meta. Los individuos más
importantes a los que apuntar son aquellos con prehipertensión. La prevención
de la hipertensión implica la optimización de los factores de riesgo
modificables. Mantener un peso corporal saludable, evitar fumar y moderar el
consumo de alcohol son factores clave para minimizar el riesgo. Además,
realizar ejercicio cardiovascular regular de intensidad moderada y comer una
dieta saludable sin exceso de sodio o grasa puede ayudar a reducir
significativamente el riesgo cardiovascular y optimizar la salud.
La
prevención del cáncer es la estrategia más rentable a largo plazo para el
control del cáncer. Está bien establecido que aproximadamente entre un tercio y
la mitad de todos los cánceres que se producen en adultos en la población
occidental se pueden prevenir mediante la adopción de estilos de vida
saludables y eliminar o minimizar la exposición a factores de riesgo asociados
al estilo de vida, como el consumo de tabaco explica el 30% de todas las muertes por
cáncer, la obesidad está vinculada ahora a 13 tipos de cáncer diferentes, el
alcohol se ha demostrado que aumenta de manera convincente el riesgo de al
menos seis tipos de cáncer: 1) oral y faringe; 2) laringe; 3) esofágico (de
células escamosas); 4) colorrectal (en los hombres solamente); 5) mama; e 6)
hígado y el uso del cribado y pruebas de detección temprana, así como los
agentes preventivos moleculares (p. ej., aspirina, tamoxifeno, la vacuna contra
el virus del papiloma humano [VPH], etc.), cuando sea necesario.
Para
el médico clínico, el conocimiento de los factores causales (etiología o
etiopatogenia) es también la base para sus actuaciones de prevención, pero
puede tener además importancia en la realización del diagnóstico diferencial,
en la justificación de las indicaciones terapéuticas y, en ciertos casos, en la
evaluación del pronóstico. En este sentido, al médico clínico le pueden
interesar los factores de riesgo determinantes de casos individuales. El
conocimiento de las causas de una enfermedad le será útil para identificar qué
individuos tienen mayor probabilidad de contraer la enfermedad, para
identificar entre sus pacientes a los individuos de más alto riesgo de enfermar
y para evaluar en cuáles se puede obtener un máximo beneficio de la
intervención preventiva o terapéutica.
Bibliografía:
A. M. Zurro, C. A. González, A. Agudo, Factores de riesgo, promoción y prevención: bases conceptuales, 2019. Elsevier España, S.L.U.
M. G. Girbaua,, M. P. Viguésc, et al, Theoretical models of health promotion in primary healthcare everyday practice, Gac Sanit. 2019. https://doi.org/10.1016/j.gaceta.2019.06.011
Buen comentario Dra. Vianey; te has caracterizado por escribir los aspectos concisos y claros de los temas que se han revisado y este no es la excepción, sobre todo por que comprendiste que la importancia de este trabajo no es desarrollar todo el tema, sino el hecho de relacionarlo con los aspectos cotidianos de tu practica como médico familiar, por lo que tu aportación y punto de vista son fundamentales y es lo que le da más valor a tu blog.
ResponderEliminarMuy buen trabajo Dra.